El jueves 25 de marzo se celebró la Asamblea Ordinaria que tuvimos que aplazar en diciembre. Asistieron 61 socios compromisarios y hubo 7 votos delegados.
El gerente relató lo acontecido durante 2020, un año muy atípico en el que las instalaciones estuvieron cerradas desde mediados de marzo hasta principios de junio, en el que se puedo salvar el verano, aunque siempre estando pendientes de los cambios de normativas y que ha dejado una caída de un 6% del número total de socios debido a que hubo algunas bajas más de lo habitual (sobre todo temporales) y a que no se pudo hacer campañas de captación ni en primavera ni en verano.
A continuación, se explicó que las obras de la Fase 1 del Plan Director transcurren según lo previsto y que, por tanto, deben estar finalizadas para el 30 de abril. La Fase 2, que se quería haber comenzado el próximo septiembre, y que consistirá en un nuevo edificio con nuevos accesos y oficinas, gimnasio y salas de actividades, se aplazará al menos un año para tratar de recuperar las principales partidas de ingresos y especialmente la de las cuotas ordinarias.
El presidente detalló el cierre contable del ejercicio de 2019 que fue aprobado por los compromisarios con 66 votos a favor y dos abstenciones, informó sobre las cuentas de 2020 y explicó el presupuesto para 2021 que fue aprobado con los 68 votos a favor y sin abstenciones ni votos en contra. Indicó también que, a partir de ahora, e incluyendo los ejercicios 2019 y 2020, las cuentas serán auditadas por una empresa externa. Además, se convocarán cada año dos Asambleas Ordinarias para que no sigan coincidiendo, como hasta ahora, en una misma Asamblea las cuentas de tres ejercicios distintos.